Skip to Content

Centrifugado de la lavadora

Sin el centrifugado, la ropa de la lavadora saldría empapada y tardaría más tiempo en secarse. Por ello, el centrifugado es una función esencial, que se puede usar incluso de forma independiente, sin formar parte de un programa de lavado. Pero ¿beneficia el centrifugado a todos los tipos de prendas?, ¿cómo se puede usar esta función de la forma más efectiva y respetuosa posible?

Ropa sucia en una lavadora

Qué es el centrifugado en una lavadora

El centrifugado es una función de la lavadora que bien puede ponerse en marcha en la parte final de un programa concreto, bien puede usarse de forma independiente. En el centrifugado se elimina el exceso de agua absorbida por las prendas durante el prelavado y el lavado, lo que favorece su posterior secado. Para ello, el tambor gira más rápido, lo que en ocasiones produce la conocida vibración de la lavadora.

Cuándo usar el centrifugado de la lavadora

A pesar de que parece que la función de centrifugado de la lavadora solo puede traer ventajas, lo cierto es que hay que tener especial cuidado al usarla, pues no todos los tejidos soportan con igual entereza el giro del motor de la máquina a determinadas revoluciones por minuto (r.p.m).

Por ello, en la mayoría de las lavadoras se pueden programar diferentes velocidades de centrifugado, de manera que las r.p.m. se puedan adaptar al tipo de tejido que se esté lavando. De hecho, los distintos programas de lavado incluyen diferentes “tipos de centrifugado”, pues no usará la misma velocidad un programa para ropa de delicada, que un programa para prendas de algodón.

Como ya se ha indicado, el centrifugado también se puede usar de forma independiente en la lavadora. De este modo, si al sacar la ropa del tambor observas que sale demasiado mojada, puedes programar un ciclo de centrifugado extra.

Cómo poner el centrifugado en la lavadora

Por norma general, el programa que elijas lleva ya incluido un ciclo de centrifugado a una velocidad concreta. No obstante, te recomendamos siempre comprobar que las r.p.m. programadas no son perjudiciales para las prendas que vayas a lavar. Si la lavadora lo permite, podrás cambiar la velocidad de centrifugado si es necesario o incluso desactivarlo. Además, también puedes seleccionar la opción de centrifugado de forma independiente (la forma de activarlo puede cambiar según la lavadora).

Pero ¿cómo saber que las revoluciones por minuto son las adecuadas? A continuación, se presenta una aproximación:

  • 600 – 800 r.p.m: ropa delicada
  • 800-1000 r.p.m: tejido sintético
  • 1000- 1200 (incluso 1400) r.p.m: tejidos más resistentes como el algodón

Qué hacer si la lavadora no centrifuga

Como has podido leer, el tiempo de centrifugado en la lavadora es muy importante en muchos casos, por eso, si de repente la ropa sale excesivamente mojada después de un lavado con centrifugado y el ciclo de centrifugado extra tampoco soluciona nada, puede que haya algún problema que impida que la función cumpla su cometido.

En primer lugar, comprueba si la carga del tambor es la adecuada y está bien distribuida. Si has llenado el tambor más de la cuenta o la carga permanece apelmazada y no se distribuye por todo el tambor, puede que el centrifugado no sea efectivo. Si no es el caso, puede ser que alguno de los componentes de la máquina esté estropeado (por ejemplo, el motor o la bomba de agua), en cuyo caso, te recomendamos contactar con el fabricante.

De nada sirve un buen centrifugado si tu ropa finalmente sale sucia. Por eso, te recomendamos los mejores detergentes para que esto no pase. Prueba Wipp Express Polvo Frescor Vernel, Wipp Express Gel Higiene y Antiolores o cualquier otro producto de Wipp Express y consigue buenos resultados de lavado.